OMI conmemora una década desde las primeras normas de reducción de emisiones de GEI en el transporte marítimo

La Organización Marítima Internacional (OMI) cumple este 15 de julio una década desde las primeras acciones para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del transporte marítimo, desde que el 15 de julio de 2011 se adoptara el primer conjunto de medidas internacionales obligatorias para mejorar la eficiencia energética de los buques, como parte del Convenio internacional para prevenir la contaminación por los buques (Convenio MARPOL).

Para apoyar la aplicación de las medidas y fomentar la innovación, la OMI ha puesto en marcha un amplio programa de capacitación y asistencia técnica, que incluye una serie de proyectos mundiales. Entre ellos se encuentran el proyecto GloMEEP del FMAM-PNUMA (ya concluido), la red mundial de centros de cooperación tecnológica marítima financiada por la Unión Europea (proyecto GMN), el proyecto GreenVoyage2050 de la OMI-Noruega y el proyecto GHG SMART de la OMI-República de Corea.

El camino hacia la reducción de GEI en el transporte marítimo 

Respecto al control de la contaminación atmosférica de los buques, la OMI debatió en 1988 donde el Comité de protección del medio marino (MEPC) acordó incluir el tema en su programa de trabajo. En 1991, la OMI adoptó la Resolución A.719(17) de la Asamblea sobre la prevención de la contaminación atmosférica por los buques. La Resolución pidió al MEPC que preparase un nuevo proyecto de anexo al Convenio MARPOL sobre la prevención de la contaminación atmosférica.

En tanto, el Protocolo de Kyoto, adoptado en diciembre de 1997, fue un paso importante en la lucha contra el cambio climático. En respuesta, en la Conferencia MARPOL de 1997, la OMI adoptó el Anexo VI al Convenio MARPOL sobre las reglas para la prevención de la contaminación atmosférica de los buques. Esta resolución invitaba al MEPC a estudiar qué estrategias de reducción de CO2 podrían ser viables a la luz de la relación entre el CO2 y otros contaminantes atmosféricos y marinos.

En la resolución 8 de la Conferencia sobre contaminación atmosférica se invitó a la Organización a que, en cooperación con la Convención marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (CMNUCC), emprendiera un estudio sobre las emisiones de CO2 procedentes de los buques a fin de establecer la cantidad y el porcentaje relativo de tales emisiones como parte del inventario mundial de emisiones de CO2.

El MEPC elaboró medidas operativas y técnicas y la OMI acordó incluir un nuevo capítulo sobre “eficiencia energética” en el Anexo VI del Convenio MARPOL. El 15 de julio de 2011, las Partes del Anexo VI del Convenio MARPOL adoptaron normas obligatorias de eficiencia energética para los buques: el índice de eficiencia energética de proyecto (EEDI) para los buques nuevos y Plan de gestión de la eficiencia energética del buque (SEEMP); esto representó el primer conjunto de medidas de eficiencia energética obligatorias para cualquier sector del transporte.

Luego, en 2016, la OMI adoptó el sistema de recopilación de datos obligatorio para que los buques recojan y comuniquen los datos de consumo de fueloil de los buques de arqueo bruto igual o superior a 5000 toneladas. La recogida de datos del primer año natural se completó en 2019.

En abril de 2018, la OMI adoptó la Estrategia inicial sobre la reducción de las emisiones de GEI del transporte marítimo. La Estrategia concibe, en particular, reducir la intensidad del carbono del transporte marítimo internacional, en al menos un 50% de aquí a 2030 comparado con los niveles de 2008, y proseguir los esfuerzos hacia el 70 % de aquí a 2050 comparado con los niveles de 2008.

En junio de 2021, la OMI adoptó un sistema formal de clasificación de buques destinadas a reducir la intensidad de carbono de todos los buques en al menos un 40% para 2030, de acuerdo con las ambiciones establecidas en la Estrategia inicial.

Apoyo a la implantación

El transporte marítimo necesitará nuevas tecnologías, nuevos combustibles e innovación para cumplir los objetivos de GEI. Las medidas obligatorias de la OMI se apoyan en la creación de capacidades, la asistencia técnica y la cooperación tecnológica. Algunos ejemplos incluyen:

* El Proyecto de asociaciones para la eficiencia energética marítima mundial (GloMEEP) del FMAM-PNUD-OMI.

* El Proyecto OMI-Unión Europea GMN (Red Marítima Global de Centros de Cooperación Tecnológica Marítima) financiado por la Unión Europea, ha creado cinco centros regionales de excelencia y hay varios proyectos piloto en marcha.

* La Alianza Industrial Global (GIA) que apoyará el transporte marítimo con bajas emisiones de carbono.

* El GIA que ha lanzado un curso de E-Learning de acceso gratuito dirigido a los marinos y a cualquier persona interesada en este aspecto del transporte marítimo.

* El proyecto GreenVoyage2050 que ha lanzado un paquete de talleres sobre “Combustibles y portadores de energía alternativos para el transporte marítimo”

* El proyecto GHG SMART que está ayudando a los países menos desarrollados y a los pequeños Estados insulares en desarrollo en sus esfuerzos de creación de capacidades mediante cursos de formación durante un periodo de cuatro años.