Junto con expresar su horror por los acontecimientos de la última semana en Ucrania y su simpatía y solidaridad con las víctimas del conflicto, Christian Roeloffs, cofundador y CEO de Container xChange, se refirió al impacto de estos hechos sobre la logística.
Según resumió, algunas partes del Mar Negro y del Mar de Azov son ahora peligrosas o intransitables. Se han producido ataques con misiles a buques y detenciones de barcos y cierres de carriles para la navegación comercial; los puertos ucranianos de Odessa y Mariupol están cerrados, dañados o atacados; el comercio y la movilización de contenedores han cesado y la carga y los equipos están atascados en los puertos.
Detalló que debido a la continua interrupción del transporte marítimo en el Mar Negro, “esperamos que la acumulación de contenedores en los puertos se agrave en las zonas de almacenamiento de toda la región”.
Confirmó además que Maersk ha retirado las reservas de envíos desde y hacia los puertos rusos (a excepción de los alimentos y los suministros médicos y humanitarios) y otras líneas navieras han empezado a seguirle.
Por otra parte señala que los puertos rusos y bielorrusos del Báltico y el Mar Negro probablemente verán una acumulación de contenedores si las líneas navieras se niegan a recalar en los puertos debido a la situación de seguridad y a las sanciones.
“Todavía no están claras todas las implicaciones de las sanciones, pero el cierre del sistema SWIFT a Rusia dificultará los pagos de los socios rusos. Además, el rublo ha caído en picada después de que el Banco Central ruso se quedara sin reservas”, apunta.
Añade que el comercio marítimo con Rusia y las empresas rusas podría ser muy difícil en los próximos meses e incluso años. “El lunes, el Reino Unido prohibió a todos los buques rusos entrar en sus puertos.
La UE ha detenido al menos una. Nuestro equipo jurídico está siguiendo la situación”, anota.
Según su análisis en la ruta Asia-Europa se podría observar una mayor demanda de envíos marítimos y equipos desde Asia debido al cambio modal. “Por ejemplo, las rutas ferroviarias y de carretera entre Asia y Europa que atraviesan Rusia y Bielorrusia están cerradas y/o son utilizadas por los militares. Las fronteras con la UE están cerradas.
El cierre del espacio aéreo a través de Rusia y Europa también ha reducido la capacidad de carga aérea”, precisa.
Agrega que “se espera que esta terrible guerra se sume a la tensión de las cadenas de suministro de contenedores a nivel mundial, trayendo aún más inflación, trastornos y retrasos”.
Sostiene, además, en general, que es probable que la situación de la disponibilidad de contenedores empeore, pero esto variará según el puerto y la región.
El centro y el norte de Europa ya están congestionados, y que cualquier otro desencadenante del flujo de carga no hará más que empeorar el estado de apilamiento de los contenedores.
Redacción y foto por el portal web Mundo Marítimo